lunes, 21 de junio de 2010

RESPETO

Respeto

Podriamos pensar que faltar al respeto es simplemente tener malos modales. Claro, hablar con la boca llena, presentarnos sucios a la escuela o el trabajo, o empujar a los otros para pasar son conductas irrespetuosas. Sin embargo, significan poco en comparacion con las verdaderas faltas de respeto: tocar a alguien sin su consentimiento; burlarnos de una religion, de un trabajo o una forma de vida diferente a la nuestra, querer utilizar a los dem·s como medios para nuestros planes, abusar de quienes estan en desventaja (los ancianos, las personas enfermas, los ninos muy pequenos, los animales). Debes evitarlo siempre. A veces la mejor forma es seguir las reglas. Pero pensar siempre “debo hacer esto”, “no debo hacer lo otro” es solo el primer paso. El gran progreso en la busqueda del respeto no esta en la inteligencia, sino en el corazon: el amor a los demas sirve de guia e inspiracion para cuidarlos y honrarlos por formar parte de la vida.



Viviendo el valor

El valor del respeto se ejerce cuando mostramos aprecio y cuidado por el valor de algo o de alguien. Puede estar dirigido hacia los derechos y la dignidad de las demas personas, hacia los de nosotros mismos y tambien hacia el entorno natural, incluyendo las plantas y los animales que lo integran. Nos ayuda a conservar intacto aquello que mas apreciamos en la vida; nos ensena a reconocer aquello que m·s aprecian los demas. Puede vivirse en forma colectiva entre un pais y otro o individual entre dos personas.



Un código universal

Una idea muy popular afirma que, al solicitar algo, importa tanto lo que pedimos, como la forma en que lo hacemos. Llamamos “cortesía” a la manera atenta en que se solicita un servicio o un objeto; es un elemento que transforma cada detalle de la vida. Mira la diferencia que hay entre “°QuÌtate de aqui” y “øPodrias dejarme pasar por favor?”. Cual de las dos formas te gustaria mas que emplearan contigo? Lo que resulta claro es que para esperar un trato correcto, tu debes darlo a los demás.


Pero la cortesÌa es solo la superficie de una actitud mas profunda… Respetar a los otros consiste en reconocer su importancia como personas que habitan el mundo y comparten la vida contigo, en saber que cada una de ellas es tu projimo, tu semejante. La lista incluye a los miembros de tu familia, a tus maestros y amigos, a tus vecinos, pero tambien a cualquier persona que pasa por la calle, aunque no la conozcas. Todos ellos, sin importar los detalles (menos aun si son hombres o mujeres) son tus iguales.


Para la vida diaria

Sigue las reglas que se siguen en tu grupo o tu comunidad, como guardar silencio en determinadas circunstancias o respetar las areas y servicios creados para las personas discapacitadas.


No aceptes ninguna actitud ofensiva o humillante: nadie debe hablarte a gritos o con groserias. Mas aun: nadie debe quitarte tus planes y las buenas ideas que guian tu vida (la vocacion por una carrera o el interes por un deporte).


Las leyes estan hechas para respetarse. Hazlo siempre y recomiendalo a tu entorno.
Aprende a ser amable y afectuoso con tu entorno: no arrojes basura en la calle, ten consideracion de los mayores, de las plantas, de las mascotas. Construye poco a poco el mundo donde quieres vivir.


Por el camino del respeto

Las dificultades hacen que muchas personas pasen por encima de las reglas —y hasta de las demas personas para conseguir sus fines. Aunque los obtengan, esta forma ha de evitarse: estan haciendo del mundo un lugar de violencia y sufrimiento.


Puede creerse que el respeto o la falta de respeto que se presentan en el hogar no tienen mayor impacto. Sin embargo, todo comienza alli: si respetamos en la casa, estamos generando respeto en el mundo. No aceptes ni un detalle de violencia en tu hogar.


A veces pensamos que las personas rudas y agresivas en su trato son fuertes. La verdad es todo lo contrario: actuan asi porque son debiles y tienen miedo.

http://www.ctv.es/USERS/seip/guada8.htm




sábado, 19 de junio de 2010

LA TOLERANCIA

EL VALOR DE LA TOLERANCIA

“dado que el mal sólo se mantiene por la violencia, es necesario abstenerse de toda violencia”



¿Qué son las virtudes?

Para crecer como personas necesitamos, al igual que un atleta, ejercitarnos todos los días en aquello que nos perfecciona. No basta querer ser responsables, por ejemplo. Es necesario todos los días hacer ejercicios de responsabilidad, hasta que lo logremos. El fruto será llegar a serlo realmente: responsable. De la misma manera, si queremos ser justos, sinceros, ordenados, …es necesario que lo practiquemos con esfuerzo y dedicación todos los días, hasta que formemos el hábito, es decir, la costumbre. Ese hábito que desarrollamos, que nos hacer ser mejores personas, se llama VIRTUD.

La virtud no es higiene moral, es decir, el objetivo no es el verse bien o el mejoramiento de uno mismo por vanidad, sino que nos debe de llevar al bien.



¿Dónde se forman las virtudes?

Las virtudes han de ser conquistadas con el esfuerzo y la dedicación de la persona que quiere adquirirlas.

Si el atleta ejercita su cuerpo para que sea mejor, la persona que quiera formar las virtudes habrá que ejercitar a su INTELIGENCIA Y A SU VOLUNTAD. Sí, el ejercicio que requerimos hacer se desarrolla en estas facultades. Por tanto, la educación de la inteligencia y de la voluntad dará como resultado a las virtudes en una persona.

La educación de la inteligencia.

La inteligencia es la facultad que nos permite pensar, reflexionar, comprender, Por ejemplo, ¿cómo sabré si abortar es bueno o es malo? Para saberlo es necesario, primero, conocer la verdad: desde la concepción en el vientre de la madre empieza a existir una persona, imagen y semejanza de Dios, que tiene su dignidad, derecho a vivir y a ser amada y respetada, aunque, por ser tan pequeñita, no la pueda ver con los ojos.

Luego, se necesita reflexionar sobre ello. Pensar acerca de la realidad de esa creaturita. Necesito relacionar todas las cosas que sé: Matar va en contra de la ley de Dios, ofende a la víctima, es una injusticia, nadie tiene derecho a quitarle la vida a otro, el bebé en el vientre de su madre es la persona más indefensa que hay,…
De ahí, mi inteligencia me dirá: “abortar es un asesinato. No lo hagas”. Para hacer todo esto, se necesita conocer la VERDAD. Pero, ¿qué es la verdad?. La verdad es la realidad, lo que existe. La verdad es lo que es, no lo que me imagino que es, o lo que dicen por ahí que es. Si rompí un plato, esa es la verdad. La verdad es la realidad. Por lo tanto, hay que educar a la inteligencia enseñándole la verdad.

La verdad no es, muchas veces, lo que la mayoría dice. Por ejemplo, hay mucha gente que dice que el divorcio no es malo, pues mucha gente se ha divorciado. No porque muchos se divorcien quiere decir que es la verdad sobre el matrimonio. Nosotros sabemos que el matrimonio no se puede deshacer pues Dios dijo: “Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre”(Mt 3,6).

La educación de la voluntad.

En la vida todo cuesta esfuerzo. ¿Acaso no te cuesta trabajo levantarte por las mañanas cuando está haciendo frío ¿Acaso no cuesta trabajo dominar los enojos cuando estás irritado? Claro que sí cuesta.

Así como a la inteligencia hay que formarla y educarla desde que somos pequeños, la voluntad también ha de ejercitarse. Un niño que nunca hace ningún esfuerzo, cuando sea adulto, ¿cómo podrá llevar bien su matrimonio cuando enfrente dificultades?

A la voluntad hay que educarla. El niño cuando nace no tiene desarrollada la voluntad. ¿Cómo formar la voluntad? Haciendo todos los días muchos esfuerzos.

Si la inteligencia busca la verdad, ¿qué es lo que busca la voluntad? La voluntad busca el bien. Y, ¿qué es el bien? El bien es todo aquello que nos ayuda a alcanzar nuestros fines: crecer como verdaderas personas, y alcancemos llegar a Dios. Todo aquello que es bueno para la naturaleza humana, es parte del bien. ¿Es bueno decir mentiras? ¿Es bueno compartir lo que tenemos? ¿Es bueno drogarse y emborracharse? ¿Es bueno hacer ejercicio?.


¿Qué tipos de virtudes hay?
1. Las virtudes humanas: Son las que nos ayudan a ser mejores personas, a crecer como seres humanos. Como son la generosidad y la honradez, el orden y la responsabilidad, la fortaleza y la sinceridad, entre otras.
2. Las virtudes cristianas, que son las que nos ayudan a llegar verdaderamente a Dios, a ser mejores cristianos. Como la caridad y la castidad, la humildad y el perdón, la pureza y la abnegación, y muchas más.

Jesucristo: Él es el mejor modelo que tenemos para imitar. Toma los evangelios y contempla a Jesús en su actuar de todos los días. Lo encontrarás amable, responsable, prudente, fuerte. Si quieres ser virtuoso de verdad, en Jesucristo tendrás a tu mejor modelo.

La Santísima Virgen María: Ella es grande por su santidad. Porque supo imitar las virtudes de Jesucristo. ¡Vaya que si hizo esfuerzo! Le costó mucho. Pero lo hizo por amor a su hijo, y por amor a nosotros. Si tienes verdadera devoción a María, imita sus virtudes.

Los santos: Todos los santos han sido hombres o mujeres normales, como tú y yo. Sin embargo, ellos se distinguieron porque quisieron imitar al Señor. Esa es la grandeza de los santos. A pesar de sus dificultades, iguales a las tuyas o a las mías, quisieron y supieron cómo educarse para vivir las virtudes, tanto humanas como cristianas. ¿Acaso tú no has de ser santa o santo? Ser santo es vivir en gracia de Dios (cumplir con nuestro fin de llegar al cielo), y ser cada día mejor como personas. ¡Tú tienes madera de santa o santo!

¿Qué son las Virtudes Cardinales?
Para despejar dudas en torno a los valores humanos y a su clasificación vamos a explicar a continuación algunas caracterizaciones:
1. LAS VIRTUDES TEOLOGALES: Las virtudes teologales (fe, esperanza y caridad) ordenan todas nuestras capacidades y fuerzas al fin sobrenatural que es Dios.

2. LAS VIRTUDES CARDINALES: Las virtudes cardinales (templanza, prudencia, justicia y fortaleza) disponen esas mismas capacidades y fuerzas pero a los medios que conducen al fin: ordenan los actos humanos a Dios.

Se llaman cardinales porque son como la bisagra o gozne (herraje articulado con que se fijan las hojas de las puertas y ventanas al quicial para que, al abrirlas o cerrarlas, giren sobre aquel) sobre el que descansa toda la vida moral humana. También las llamamos así porque son como ciertas condiciones necesarias para cualquier otra virtud.




http://www.lorenzoservidor.com.ar/person01/virydef.htm


VALORES


Tipos de valores

  • Valores espirituales

  • Valores morales o humanos

    * Valores personales

    * Valores familiares

    * Valores sociales

    Por supuesto que debe haber una jerarquía de valores, que depende de la educación que uno ha tenido. ¿Cuál debería ser la verdadera jerarquía?


lunes, 14 de junio de 2010

LOS VALORES MORALES


Valor es aquello que hace buenas a las cosas, aquello por lo que las apreciamos, por lo que son dignas de nuestra atención y deseo. El valor es todo bien encerrado en las cosas, descubierto con mi inteligencia, deseado y querido por mi voluntad.
Los valores dignifican y acompañan la existencia de cualquier ser humano.

Son aquellos valores que perfeccionan al hombre en lo mas intimamente humano, haciendolo mas humano, con mayor calidad como persona.